Noche de Gala
La noche del sábado 13 se dio la bienvenida a todos los socios para la celebración de esta noche de gala que tuvo lugar en Marbella. Todos en El Real Club de Golf Las Brisas sentimos que la ocasión era un gran honor a la vez que todo un reconocimiento a un formidable viaje de 50 años.
Al inicio la gala, a las 6 de la tarde del sábado, El Presidente se situó en la entrada para dar la bienvenida a todos los socios y ofrecerles un cocktail de bienvenida que consistía en unos canapes, ostras, champagne, vino rosado de las bodegas AIX con D.O de la Provenza francesa, cortesía de nuestro socio Cees Weima, y de vino prosecco ofrecido por la bodega Astoria.
El maestro de ceremonias condujo a los invitados hacia la carpa de la gala donde tuvo lugar la cena hacia las 8 pm y el visionado de un pequeño documental de la historia de Las Brisas (vease pinchando aquí). Entonces Carl. E. Stålberg, ejerciendo de Presidente, dio la bienvenida a más de 270 socios e invitados con estas palabras: “Sin la historia, la trayectoria y la experiencia de los socios más veteranos sería difícil llevar adelante a este Club. Tenemos un club y unas instalaciones fantásticas, y además también tenemos un valor oculto del que no hablamos mucho: nuestros empleados”. También alabó los esfuerzos de socios, que como Ulf Bexelius, comenzaron el proceso de renovación del Campo, los de Carlos Jiménez, que fue Presidente en la legislatura inmediatamente anterior, por haber conseguido la aprobación del mismo durante las juntas anuales y extraordinarias, los de Terry Daniells, por liderar este gran proyecto de renovación del campo como Presidente del Comité de Greenes y los de Leopold Brees, su tesorero, por la gestión de la financiación de toda la renovación. También recibió de Pablo Mansilla, Presidente de la Federación Andaluza de golf, una placa conmemorativa para las Brisas por su 50 aniversario concedida por la Real Federación Española de Golf.
Después de la cena de gala hubo, se mostró otro video (vease pinchando aquí) y se rindió homenaje junto con un brindis por el Rey, seguido de un poco de baile en una espectacular pista. Desde la carpa se pudieron contemplar unos increíbles fuegos artificiales. En definitiva, una noche para recordar.